Historia
La Hermandad del Arcángel San Rafael tiene sus raíces en la profunda devoción que el pueblo de Córdoba profesaba a su Custodio y Protector, el Arcángel San Rafael, tras sus apariciones y su declaración como guardián de la ciudad. Esta devoción llevó a la fundación de la hermandad en el siglo XVII, un período de auge de cofradías y hermandades como asociaciones ligadas a la Iglesia y dedicadas a la catequesis y el culto.
Las primeras reglas de la hermandad fueron aprobadas en 1655 por el obispo D. Antonio Valdés, marcando el inicio oficial de la corporación. Sin embargo, debido a los cambios históricos y sociales, en 1766 se aprobaron nuevas reglas bajo el obispo D. Francisco Solís, adaptando la hermandad a las necesidades de la época.
A lo largo de los siglos, la hermandad ha mantenido viva la devoción al Arcángel San Rafael, preservando su legado como símbolo de protección y fe para Córdoba. Hoy, sigue siendo un referente de la piedad popular y un custodio de la tradición religiosa de la ciudad.
Sagrados Titulares
El Arcángel San Rafael, Custodio de Córdoba, es una figura central en la devoción y el arte de la ciudad. Desde su declaración como guardián en 1578, tras sus apariciones, los cordobeses han rendido culto a esta advocación, dando lugar a una rica producción artística. La imagen más representativa se encuentra en la Iglesia del Juramento de San Rafael, construida en 1610 para honrar al Arcángel.
La talla que preside el templo, obra del reconocido artista Alonso Gómez de Sandoval, fue terminada y bendecida en 1795 por el obispo Don Antonio Caballero y Góngora. Tallada en madera y policromada, representa a San Rafael con los elementos iconográficos tradicionales: el báculo de peregrino con una calabaza, un pez (símbolo de sanación) y una nube con ángeles que lo sostienen. Además, dos cartelas destacan sus frases más célebres: “Yo te juro por Jesucristo Crucificado que soy Rafael, a quien tiene Dios puesto por guarda de esta ciudad” y “Medicina Dei” (Medicina de Dios).
Esta imponente imagen no solo es el Titular de la Hermandad del Arcángel San Rafael, sino también un símbolo de la profunda devoción que los cordobeses sienten por su protector. Su presencia en la Iglesia del Juramento refleja el arraigo histórico, religioso y artístico de esta advocación en la ciudad.
Sede Canónica
La Iglesia del Juramento de San Rafael, ubicada en el barrio de San Lorenzo, es un templo emblemático de Córdoba, construido en 1610 para honrar al Arcángel San Rafael, Custodio de la ciudad. Bendecida en 1732, su creciente popularidad llevó a una ampliación entre 1796 y 1806, diseñada por el arquitecto Vicente López Cardera y bendecida por el obispo Don Pedro Antonio de Trevilla.
El edificio, de estilo neoclásico, destaca por su fachada de piedra, coronada por un frontón triangular con las imágenes de San Rafael, San Acisclo y Santa Victoria, y flanqueada por dos torres con campanarios. En su interior, de planta circular, resalta el retablo principal, obra de Gómez de Góngora, que alberga la imagen de San Rafael y está rematado por un Cristo Crucificado de Diego Morales. Además, la Capilla del Sagrario (1853-1855) guarda las imágenes de la Hermandad Universitaria, y otros retablos, como el de Nuestra Señora del Pozo, reflejan devociones populares del barrio.